La motivación es una especie de energía que nos impulsa a hacer algo. Tiene mucho que ver con nuestras emociones y ánimo de hacer una cosa, aunque puede ser visto desde diferentes puntos de vista.
La motivación puede manifestarse por medio de alegría y pasión para ejecutar una tarea, como también puede no generar ninguno de esos sentimientos, pero sí empujarte a seguir adelante porque, por ejemplo, querer que tus hijos estén bien te motiva a salir a trabajar.
¿Cómo se desarrolla la motivación?
La motivación comienza por la necesidad de cumplir un objetivo, que es ese agente impulsor que nos llena de entusiasmo. Por ejemplo:
- Querer perder peso.
- Salir de una crisis financiera.
- Experimentar el éxito en el deporte.
Puede haber muchas necesidades en una misma acción, hay quienes quieren perder peso para verse mejor, y otros solo para tener salud, pero ambas necesidades u objetivos son los que les motivan.
La toma de decisiones es importante en el desarrollo
Ya podemos decir que estás motivado por una necesidad, sin embargo, llega el momento de tomar una decisión, emprender el camino o no. La decisión que tomes va a determinar si la motivación continúa su desarrollo.
Hay personas que comienzan con un nivel de motivación muy bajo, pero en el camino las experiencias les permiten elevar ese nivel de entusiasmo, razón por la cual creemos que la toma de decisiones es importante para desarrollar la motivación.
Estas experiencias también podrían jugar en contra, desmotivando al individuo, en caso de que sean negativas.
La certeza alimenta la motivación y la duda la puede matar
Estar seguro de que ese camino es el correcto es algo que te puede motivar, no tener certeza provoca dudas y desmotivación.
Por ello muchos motivadores te hablan con palabras de ánimo, te recomiendan hablar contigo, con el fin de convencerte que sí puedes lograrlo, pero también que cosecharás los frutos que estás esperando.
En este sentido, dentro del desarrollo de la motivación es importante rodearse de personas optimistas, cuidar lo que escuchas, lees y ves.
La automotivación y su importancia
En el desarrollo de la motivación hay que hablar de la capacidad de automotivarse. El entusiasmo de muchas personas termina cuando no hay un agente externo que lo impulse. Pero una persona que se auto-motiva puede ella misma salir adelante.
Hay términos muy relacionados con este tema que debes profundizar, como la perseverancia, resiliencia, dominio propio, y la disciplina.
Una persona que desarrolla estas habilidades suele ser más fácil de automotivarse. Siempre tendremos adversidades, solo tenemos que saber cómo abordarlas.
Quien se automotiva es como tener un coche y producir tu propio combustible, no depende de otros para andar. Esto no quiere decir que no requiera motivadores, todos en algún momento lo necesitamos, pero la probabilidad de éxito es mayor.
Errores que debemos evitar en la motivación
En primer lugar, debemos evitar las falsas expectativas, ya que en principio nos motivan, pero es casi seguro que cuando nos encontremos con la realidad nos desmotivemos y frustremos.
Por otro lado, motivar a alguien no es lo mismo que presionar. Ciertas presiones nos motivan, pero no lo es todo. Incluso, hay que tener mucho cuidado con este tipo de prácticas porque pueden generar traumas.
Un ejemplo es cuando para motivar al niño a comer le decimos que vendrá un monstruo a comérselo. Es muy probable que se despierte un temor intenso en su mente.
Motivar con mentiras es otro fallo que solemos cometer, ya que la persona o nosotros mismo, nos frustraremos.
Estos son solo unos de tantos errores que se pueden cometer.
¿Cómo saber qué me motiva?
No es una pregunta que se pueda responder en unos cuantos párrafos, ya que es necesario conocerte personalmente para dar un diagnóstico más certero. Por eso, si consideras que tienes problemas de motivación te recomendamos visitar un profesional en la materia (psicólogo).
Es importante que respondas algunas preguntas, conversar, y luego el profesional podrá tener una idea de cómo puedes desarrollar con mayor efectividad tu motivación.
¿Cuándo debo visitar al profesional?
Siempre puedes hacerlo, desde una simple desmotivación por tu trabajo, hasta una desmotivación como síntoma de una depresión.
Muchos casos de depresión comienzan con la desmotivación, o por lo menos es uno de los síntomas más visibles. Así que, si no sientes entusiasmo, sino que crees que lo mejor es rendirte ¡Busca ayuda!
Ejercicios para saber qué me motiva
Mientras visitas a un profesional, puede hacer el siguiente ejercicio para tener una idea de lo que te motiva:
- Pregúntate ¿Qué es lo que más hago?
- Ahora pregunta ¿Por qué lo hago?
La respuesta a esa última pregunta es una señal de lo que te motiva, en la mayoría de los casos (no siempre es tan claro).
Por otro lado, hay ejercicios de respiración que te pueden ayudar a disminuir la ansiedad y el estrés, dos factores que son enemigos de la motivación. Hay muchos tipos, cualquier te puede ayudar siempre y cuando te puedas relajar.
Las relaciones y la motivación
Hagamos un poco de énfasis en la relación que existe entre las personas que nos rodean y nuestra motivación. No siempre la motivación se desarrolla con acciones muy notables, en la mayoría de los casos es progresiva según el entorno que te rodea.
Por ejemplo, escuchar todos los días que no hay formas de superar la crisis financiera, tarde o temprano va a afectar tu motivación, porque un día puede que estés muy firme y con entusiasmo, pero el día que lo escuches y andes desmotivado, la motivación puede llegar a lo más bajo.
Por eso es importante cuidar con quién nos relacionamos a diario. No es lo mismo escuchar a una persona tóxica cada cierto tiempo, que hacerlo todos los días, la probabilidad de contaminación emocional es mucho mayor.
Así que un ejercicio muy práctico es comenzar a alejarte de las personas tóxicas, y rodearte de personas que te puedan motivar a seguir adelante según tus proyectos.
¿Necesitas un profesional? Cuenta con nosotros, te podemos ayudar a mejorar y desarrollar tu motivación.