Además de un psicólogo ¿Que necesita un niño para crecer sano mentalmente?
Una mente sana es sinónimo de una persona con gran control de sus emociones y comportamiento. Es de gran importancia ayudar a los niños en desarrollo a controlar sus emociones y pensamientos para que de esta manera puedan crecer saludables en ese sentido, pero ¿Qué necesita un niño para crecer sano mentalmente además de un psicólogo?
Los menores deben ser capaces de asumir los desafíos de la vida, recuperarse de situaciones que puedan presentarse y construir buenas relaciones sociales y familiares, para ello, los padres juegan un papel muy importante. Son las personas que están más cerca a ellos y quienes pueden transmitir la información y seguridad necesaria para su sano crecimiento emocional y mental. Por tal motivo, la educación emocional debe emplearse desde la infancia.
Consejos para que los niños crezcan fuertes emocional y mentalmente
Como padres, podemos apoyarlos con técnicas aplicables y funcionales que permitirán que nuestros hijos desarrollen de buena manera sus emociones y por lo tanto desarrollen una mentalidad sana y fuerte, que no dependa de tratamientos de ningún tipo y que le permita manejar adecuadamente situaciones fuertes en un futuro. Incluso nuestros consejos de psicología sin la ayuda de los padres quedarían anulados.
Es importante realizar desde temprana edad, prácticas y establecer hábitos que beneficien la comunicación, relación entre padres y familiares, y que fomenten el buen carácter emocional desde niños
1. Practicar deporte
La práctica de deporte beneficia al buen desarrollo mental, emocional y físico de los niños. Es por eso que se consideran una excelente herramienta para un desarrollo sano en varios aspectos. Debes considerar un deporte de acuerdo a su edad.
2. Independencia
Es importante promover la independencia en nuestros hijos, ya que es un pilar fundamental para la sanidad emocional y mental. Debemos estimularlos a realizar tareas por cuenta propia, promover la autoconfianza para así aumentar la seguridad propia.
3. Buena relación con la sociedad
Como representantes debemos inculcar un buen carácter emocional, ayudándolos a desarrollar empatía y fortalecer las relaciones sociales.
4. Libertad de expresión
Es importante que los niños puedan expresar libremente sus ideas y emociones, la tolerancia es vital y esto ayudará a desarrollar la inteligencia emocional.
5. Establecer normas
El éxito en la vida depende del conocimiento y el respeto de las figuras de autoridad que desde niños se aprenden, por tal motivo se considera que quienes poseen un sistema de normas de comportamiento pueden lograr más cosas que quienes no saben lo que deben hacer y lo que no, así como el respeto por las normas y las figuras de autoridad.
6. Reconocimiento de emociones
Como representantes se debe orientar a los niños sobre el reconocimiento de emociones como ansiedad, rabia, tristeza o alegría. De esta manera ellos serán capaces de conocerse por sí mismos y sabrán como reaccionar antes diversas situaciones en su vida diaria.
7. Creación de rutinas
La creación de rutinas puede beneficiar grandemente a los niños, ya que en su futuro les ayudarán a ser personas más planificadas y tendrán objetivos claros y estables.
8. Cuidar la salud
El cuidado de la salud es importante, y se puede fomentar con la aplicación de una buena alimentación, ejercicio físico, descanso adecuado y el tiempo necesario para la recreación. Es importante que sepas que las personas físicamente sanas tienen mejor rendimiento emocional y mejor desenvolvimiento ante algunos conflictos.
Lo mejor que se puede hacer como padres, es ayudar a nuestros niños a crecer y desarrollarse como personas luchadoras capaces de asumir y resolver conflictos y emociones como ansiedad, miedo, angustia e inseguridades. De esta manera tendrán en su vida experiencias positivas. Sentirse bien con ellos mismos será el punto de partida para mantener una buena relación con los demás.
Se debe tener cuidado con síntomas negativos sobre la salud mental y emocional
Como padres, debemos estar interesados por el desarrollo mental y emocional de nuestros hijos, de esta manera debemos valorar algunas condiciones que pueden indicar que el niño no se esta desarrollando adecuadamente y su salud emocional le esta afectando negativamente.
Los principales síntomas de una salud emocional y mental deficiente son:
- Poca comunicación.
- Escasa expresión de sus sentimientos y emociones.
- Pobre concepto propio.
- Poca autoestima.
- Mínimo control de sus emociones.
- Falta de limitaciones.
Un desarrollo mental adecuado depende de la presencia de los padres y su ejemplo diario. Es bien sabido que los niños aprenden siguiendo el ejemplo de sus padres, ya que son las personas más cercanas, es por eso que como padres debemos dar un excelente ejemplo de comunicación y expresión de emociones y sentimientos.
De esta manera debemos establecer hábitos de comunicación con los niños y así permitirles formar una identidad propia e incrementar su autoestima. Podemos seguir algunas ideas que ayudarán a los niños a crecer como adultos funcionales e independientes.
- La igualdad para todos.
- Mantener una comunicación saludable.
- Buena comunicación entre los miembros de la familia y la libre expresión de observaciones, sentimientos y pensamientos.
- Establecimientos de normas y límites adecuados.
- Resolución de conflictos de manera asertiva.
Debes saber y trabajar para que el niño crezca mentalmente fuerte y sano, de esta manera será capaz de afrontar con éxito los desafíos y dificultades de la vida.
Un desarrollo mental fuerte desde pequeños
Es importante estimular el desarrollo de la autoeficacia, autoestima y confianza, de esta manera beneficiamos directamente a la salud mental de los niños. Es importante integrar algunos aspectos como los siguientes:
- Evitar pensamientos negativos e implantar pensamientos realistas.
- Aprender a controlar las emociones.
- Desarrollar buen comportamiento y conducta ante situaciones desfavorables.
- Transmitir habilidades que ayuden a corregir el comportamiento.
- Dejar que los niños cometan sus errores.
- Evitar la negatividad hacia ellos.
- Ayudarlo a enfrentar los miedos.
- Promover situaciones incomodas, para que resuelva por su cuenta las situaciones.
- Enseñar a controlar las emociones.
- Asumir responsabilidades.
Recuerda, no se trata de crecer como padres, sino como personas; de esta forma podremos aprender y crecer como familia sin necesidad de requerir consultas con psicólogos infantiles. Aunque en ocasiones puede ser necesario, pero siguiendo estos prácticos consejos y estableciendo nuevos hábitos para el desarrollo emocional de nuestros niños podremos evitar que se presenten problemas en un futuro.
Como pareja, se debe dar un buen ejemplo, reflejando una buena relación personal y social, con confianza y responsabilidades individuales.
