En esta oportunidad te enseñamos qué es el trastorno dismórfico, sus síntomas, diagnósticos, tratamiento y mucho más. Así que si quieres aprender más acerca de esta enfermedad sigue leyendo.
¿Qué es el trastorno dismórfico? Es una enfermedad que afecta la mente del paciente, y lo lleva a pensar de forma descontrolada en sus defectos físicos, ya sea uno o varios. Generalmente son defectos en su apariencia, habilidades, físicos, y las demás personas lo consideran un defecto mínimo e irrelevante.
De manera que este trastorno magnifica un defecto, haciendo que el paciente no pueda dejar de pensar en ello, sintiendo vergüenza, ansiedad, intimidación, baja autoestima, etc. El gran problema de este trastorno, es que hace que el afectado se aísle, evitando situaciones sociales que lo expongan.
Datos curioso del trastorno dismórfico
Una persona con esta afección se enfoca mucho en su apariencia, a cada rato lo puedes ver frente al espejo, se asean más de lo normal para “reparar el gran defecto”. Todo esto provoca en la persona mucha más ansiedad, y no le permite enfocarse en otras áreas importantes de su vida:
- Estudios
- Familia
- El trabajo, etc.
Una persona con este trastorno adopta comportamientos repetitivos que terminan causando daños emocionales y mentales ante la frustración de “No importa el esfuerzo que hago, igual el defecto está allí”. Y nunca estará satisfecho porque es un trastorno de percepción.
Muchas personas han gastado una gran cantidad de dinero en cosméticos y otros productos para verse mejor, muchas veces funciona pero solo de momento, porque más adelante si no se trata el problema de raíz la ansiedad regresa y el producto que te ayudó antes ya no es suficiente.
Esta enfermedad provoca mucha angustia, tristeza, depresión, que sin importar lo que hagas para verte mejor tu condición mejora. Atacar el problema de raíz significa someterse a un tratamiento psicológico, específicamente una terapia cognitivo-conductual, y de ser necesario será referido para que te indiquen medicamentos.
Síntomas del trastorno dismórfico
Como dijimos antes el principal síntoma es la percepción de un defecto que otros no ven o no parece tan importante, pero a ellos les causa gran preocupación y no pueden dejar de pensar en ello. También podemos mencionar los siguientes síntomas:
- Las personas con este trastorno se auto-perciben feas e incluso deformes.
- Otro síntoma es que creen que todos están fijamente mirando ese defecto, se burlan de ella y menosprecian.
- Si quieres saber si tienes este trastorno, analiza cuantas veces intentas ocultar algún defecto de forma exagerada y casi no lo puedes controlar ¡Ese deseo o necesidad es un síntoma importante!
- Compararte con los demás en repetidas ocasiones es una señal de que existe un trastorno que tiene que ver con tu apariencia.
- Buscar la aprobación de otras personas respecto a tu apariencia.
- Aislarte y evitar el contacto directo con las personas.
- La tendencia perfeccionista es otra señal que nos hace pensar que tiene un trastorno dismórfico.
Obsesiones relacionadas con el trastorno dismórfico
Los enfoques excesivos en partes del cuerpo más comunes son los siguientes: La nariz, arrugas, acné, forma del rostro, orejas, apariencia del cabello, calvicie, venas en la piel, textura de la piel, forma y tamaño de los senos, musculatura, peso, forma y tamaño de los genitales, entre otros.
La dismorfia muscular generalmente ocurre en los hombres, quienes desean tener una musculatura “perfecta” según lo que el marketing ha vendido.
¿Qué debo hacer para tratar el trastorno dismórfico?
Si sospechas que sufres de este trastorno, lo primero que debes hacer es consultar al médico. Si sientes vergüenza por apariencia, no es 100% seguro que tengas esta enfermedad, pero para diagnosticar es necesario visitar al profesional.
En caso que no sea este trastorno, de igual forma te ayudará para que te sientas mejor contigo mismo. Si es el caso, el psicólogo profesional te guiará, ya que difícilmente un trastorno de este tipo mejore por sí solo.
Por el contrario es una enfermedad que empeora al pasar los años si no se controla, provocando cada vez más ansiedad, depresiones e incluso conductas suicidas.
¿Qué hacer si conozco a una persona con este trastorno?
Evita complicar la situación con burlas y críticas. Comentarios como “Estás trastornado, enfermo, estás loco…” solo hace que las personas coloquen una barrera que no te permita ayudarlo.
Debes acercarte con mucha empatía, escucharlo y motivarlo a ir a un profesional. Puede partir de la idea que el psicólogo no es para locos, que todos necesitamos de uno porque él es quien detectará si necesitamos ayuda.
Incluso te puedes comprometer a asistir a una consulta psicológica para ti, como prueba de que todos necesitamos de uno. Si el paciente accede pero bajo condiciones, cumple cada una de ellas, como por ejemplo:
- Ir solo, o acompañado contigo.
- Mantener en secreto la consulta.
- O cualquier otra condición que establezca.
Motiva siempre al paciente a seguir los consejos del profesional, ya que si no lo hace la consulta sería en vano.
Conclusiones acerca del trastorno dismórfico corporal
Ya nos ha quedado claro de qué trata esta enfermedad y lo que debemos hacer, ya para finalizar y complementar esta información es importante conocer la siguiente información:
- Esta enfermedad empeora con el consumo de drogas.
- Su origen puede estar en una herencia familiar, experiencias traumáticas relacionadas con tu cuerpo, o un problema en la función cerebral.
- Esta enfermedad comienza en la adolescencia, aunque puede variar.
- La presión social tiene mucho que ver con esta enfermedad, como por ejemplo las expectativas de belleza.
- Sufrir otras enfermedades mentales puede hacerte más propenso a este trastorno: depresión, ansiedad, etc. Así que cualquier problema debe ser atendido desde el punto de vista profesional.
Aunque no se conoce una forma de evitar esta enfermedad, si se puede tratar y evitar los factores que lo pueden originar, como por ejemplo crear modelos falsos de perfección, burlarse de las personas o menospreciar a alguien por sus “defectos”.